Mejorar la maniobrabilidad: Al encontrar carreteras irregulares u obstáculos, el conductor puede elevar el chasis para aumentar la distancia al suelo, evitando que la parte inferior del vehículo roce y mejorando la capacidad de conducción.
Mantener el vehículo nivelado: Cuando la carga del vehículo aumenta (como cuando está completamente cargado con pasajeros o carga), la bomba de aire inflará automáticamente las bolsas de aire del eje trasero para asegurar que el vehículo permanezca nivelado, evitando el "cabeceo" y asegurando así la estabilidad del vehículo durante el viaje y la precisión del ángulo del haz de luz.
Etapa de inflado: El motor impulsa el pistón para comprimir el aire, que entra en el tanque de almacenamiento de aire a través de la válvula de retención. La máquina se detendrá automáticamente cuando la presión alcance el valor establecido (como 8 bar).
Etapa de regulación: La unidad de control, basándose en la señal del sensor de altura de la carrocería del vehículo, infla o desinfla el resorte neumático a través de la válvula de distribución. Cada regulación dura de 3 a 5 segundos.
Protección de seguridad: Cuando la presión excede los 12 bar, la válvula de seguridad se abre para aliviar la presión. El motor cortará automáticamente la energía cuando se sobrecaliente.