El Frasco sin Aire: El Guardián de la Integridad de la Formulación
Un frasco sin aire no es simplemente un recipiente; es un sistema de preservación avanzado diseñado para actuar como una bóveda hermética para formulaciones sensibles. Representa un cambio fundamental del almacenamiento pasivo a la protección activa, aprovechando un diseño mecánico de precisión para eliminar los principales enemigos de la eficacia: el aire, la luz y los contaminantes.