Vidrio ámbar o azul cobalto – Protege los aceites de la luz ultravioleta, previniendo la oxidación y degradación.
Sellos herméticos – Reduce la evaporación y mantiene la integridad del aceite.
Material de vidrio – No reactivo, asegurando que no haya lixiviación química (a diferencia del plástico).
Tapones cuentagotas/Reductores de orificio – Permiten una dispensación controlada, minimizando derrames y desperdicios.